México, 19 jun (Prensa Latina) El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, reiteró hoy su decisión de jamás permitir que algún gobierno extranjero se inmiscuya en asuntos que solo corresponden a las autoridades mexicanas.
Eso, dijo, es hacer valer nuestra soberanía y no comprometerla con acuerdos como Rápido y Furioso en privado, de espaldas al pueblo, sin informar y aceptando, en vez de ayudar a la gente.
El mandatario hizo esas precisiones en su conferencia de prensa matutina realizada hoy en Cuernavaca, estado de Morelos, como parte de su recorrido por entidades regionales cercanas a la capital, a las que se pueda trasladar en auto por carretera.
Dicho tema surgió a raíz de una pregunta sobre una respuesta pendiente del gobierno de Estados Unidos acerca de un acuerdo discreto de la administración del expresidente Felipe Calderón (2006-2012), durante su guerra simulada contra el narcotráfico que desató la actual violencia criminal en México.
El acuerdo consistió en introducir de forma ilegal armas codificadas de Estados Unidos a México para presuntamente «rastrear» a las bandas que las usarían, lo cual fue un fraude o un fiasco, según el actual gobierno.
López Obrador respondió que no hay una respuesta del gobierno de Estados Unidos sobre Rápido y Furioso que pueda definir un conocimiento y papel activo del expresidente Calderón, y recordó que está abierta la investigación en contra de su exsecretario de Seguridad Publica, Genaro García Luna, detenido allá por lavado de dinero y otros delitos vinculados a los cárteles de la droga.
El mandatario dijo que continúa la investigación, pero no hay respuesta sobre lo que consideramos una violación de la soberanía nacional, pues se permitió la introducción de armas con el conocimiento del gobierno de México y hay evidencia, información, que se está desclasificando en Estados Unidos.
Allí se dice que el operativo se hizo en forma conjunta entre los dos gobiernos para introducir armas de contrabando que causaron muertes y se utilizaron para asesinar personas, por lo que el gobierno de Estados Unidos está obligado a responder.
Lo que hacemos es defender nuestro derecho soberano a decidir sobre la política de seguridad en México, pues había mucha incidencia de agencias del extranjero, una injerencia total, y eso ya no es así, pues ahora son relaciones de colaboración con respeto mutuo.
No vamos a permitir, repitió, que algún gobierno extranjero se inmiscuya en asuntos que solo le correspondes a las autoridades mexicanas, lo cual no significa que no haya cooperación, pero nosotros decidimos si la hay, siempre y cuando se respete nuestra soberanía.